¿Cómo es que pretendo expresar el dolor que enciende a mi corazón?
No se si esta agitación fue fecundada dentro de mi taza de café, o en las letras de un hombre nuevo en mí.
Sus palabras se cuelan dentro de mí. Y yo le siento dentro, como el amor olvidado en aquella copa que a otro le permití derramar sin recato cuando se fue de mi lado.
Fantaseo con algo que no existió, y cuando me concientizo sobre ello me ahogo en la música, me estremezco e intento no pensar en que no se abandona, a quien jamás se le ha acompañado.
El encanto masculino nos sigue sorprendiendo, ¿no es así?.
Usted quiera, adore y tome esa ilusión, después de todo es el alimento de un poeta, ¿no lo cree?.
La urgencia por respirar aires exóticos, es cada día más fuerte.
Está al tanto de sus movimientos:
Dioniso (El resucitado)
Mis auras para usted:
"La salvaje Catriela"