Catriela Soleri
Al final de la jornada termino sintiéndome igual que ayer, sola entre una serie de luces que sombrean el drama de morir sin unos labios amados, para besar por última vez.

Observo a las siluetas antes amigas, caminando como el pasto acariciado por el viento. Me escondo, todo es como antes.


El ruido incrementa al a par de mi silencio.
Porque dormir es la mejor manera de fingir que no se piensa en algo; de ocultar detrás de los párpados. Dejando para mí, las lágrimas que me arrancas cuando te alejas.

ODIO que me imagines como no soy, porque ¿Quién soy yo? ¿Aquella que te ha de contemplar siempre, mientras cierras la puerta?


Desearía que no me conocieras, que leyeras muy lejos mi corazón, pero, ya estás dentro.
Aunque abra los ojos en busca de otra presencia, no es más que una sólida ausencia; que crece progresivamente con el deterioro de MIS esperanzas.
2 Responses
  1. Unknown Says:

    Me encanta como escribes, me encanta como suena lo que escribes.

    Aunque no comprendo del todo lo que escribes. Escribes de manera tan ambigua pero eso es lo que más me gusta de como escribes.


  2. Niña aprende a no dejar tu contraseña guardada en maquinas públicas :)

    Pol.