Catriela Soleri
Como quien ya no quiere pelear en la guerra,
Aquel hombre se venció y dejó el camino libre.
Con la cara y las ropas llenas de tierra,
Recorre solo el regreso como si fuese una liebre.

El amor perdió en un instante de pasión,
Pero no fue el quien cometió el error.
Su amada y su mejor amigo estaban en acción,
Lo traicionaron y no existe algo peor.

Y así, deseando olvidar su imagen y no volver a amar,
Maquiló un plan con vehemente sutileza:

Se arrancó con dolorosa fuerza cada ojo,
Y de este modo no la volvió a mirar.

Pero notó un inmenso despojo…
Cuando la sintió regresar…

Su corazón había regalado,
Y sin sentimientos se había quedado,
Por no haber esperado,
A quien lo seguía amando.